Duelo

Jun 23, 2024 Edit in Github

El post original de GSnow en reddit: https://www.reddit.com/r/Assistance/comments/hax0t/my_friend_just_died_i_dont_know_what_to_do/c1u0rx2/

Está bien, aqui va. Soy viejo. Lo que eso significa es que he sobrevivido (hasta ahora) y mucha gente que he conocido y amado, no lo ha hecho. He perdido amigos, mejores amigos, conocidos, compañeros de trabajo, abuelos, mamá, parientes, maestros, mentores, estudiantes, vecinos, y muchas otras personas. No tengo hijos, y no puedo imaginarme el dolor que debe ser perder uno. Pero aqui van mis dos centavos.

Desearía poder decir que uno se acostumbra a la gente morir. Nunca lo hice. No quiero hacerlo. Me hace un agujero cada que alguien a quien amo muere, sin importar las circunstancias. Pero no quiero que “no importe”. No quiero que sea algo que solo pase. Mis cicatrizes son un testamento del amor y la relación que tenia por y con esa persona. Y si la cicatriz es profunda, también lo es el amor. Que así sea. Las cicatrizes son el testamento a la vida. Las cicatrices son el testamento de que puedo amar tan profundo y ser herido, o incluso arrancado, y que puedo curarme y continuar viviendo y amando. Y el tejido de la cicatriz es mas fuerte de lo que la piel original lo fue alguna vez. Las cicatrices son un testamento a la vida. Las cicatrices son solamente feas a aquellos que no pueden ver.

En cuanto al duelo, descubrirás que llega en olas. Cuando el barco recién se hunde, te estás ahogando, con escombros a tu alrededor. Todo lo que está flotando alrededor te recuerda a la belleza y la magnificiencia del barco que fue, y ya no es. Y todo lo que puedes hacer es flotar. Encuentras una pieza de escombro y te afferas a ella por un tiempo. Tal vez es algo físico. Tal vez es una memoria feliz o una fotografía. Tal vez es una persona que también está flotando. Por un tiempo, todo lo que puedes hacer es flotar. Mantenerte vivo.

En el comienzo las olas tienen 100 metros de alto y chocan contra ti sin misericordia. Llegan cada 10 segundos y ni siquiera te dan tiempo de recuperar tu aliento. Todo lo que puedes hacer es agarrarte y flotar. Después de un tiempo, quizá semanas, quizá meses, te darás cuenta que las olas siguen siendo de 100 metros, pero llegan más separadas. Cuando llegan, aún chocan sobre ti y te arrastran. Pero entre ellas, puedes respirar, puedes funcionar. Nunca sabes que es lo que va a desatar el duelo. Puede ser una canción, una foto, una intersección de calles, el olor de una taza de café. Puede ser cualquier cosa… y la ola llega arrasando. Pero entre las olas, hay vida.

En algún momento, y es diferente para cada quien, descubrirás que las olas serán solo de 80 metros. O de 50 metros. Y aunque aún llegan, lo hacen mas separado. Puedes verlas venir. Un aniversario, un cumpleaños, o navidad, o aterrizar en O’Hare. Lo puedes ver venir, en su mayor parte, y prepararte. Y cuando choca contra ti, sabes que, de algun modo, saldras del otro lado. Empapado, chorreando, aun sosteniendote de una pieza de escombro, pero saldrás.

Tomalo de alguien viejo. Las olas nunca dejan de llegar, y de alguna manera no quieres que dejen de hacerlo. Pero aprendes que las vas a sobrevivir. Y otras olas llegarán. Y también las sobrevivirás. Si tienes suerte, tendrás muchas cicatrices de muchos amores. Y muchos naufragios.